15 semanas, 6 días: esto se acaba

Pero bueno, ¿otra vez contando semanas?

Sí, sí. Pero no, no os asustéis. Si durante un embarazo todo se cuenta en semanas, después del parto comienza una nueva cuenta:

¡La cuenta atrás de la baja por maternidad! 

Mañana Martín cumplirá 16 semanas, por lo que hoy es mi último día de baja maternal…

¿Sabéis lo que eso significa?

Que, además de volver a trabajar, me toca despedirme de este pequeñajo por unas horas al día.

Vale, lo reconozco, en mi caso no es súper duro, ¿Por qué? Porque ya tomé la decisión cuando nació Emma y no voy a cambiar ahora:

Continuaré con mi reducción de jornada.

Una decisión que por suerte nos podemos permitir. Una reducción que me permite dejar a Martín con las abuelas por las mañanas y disfrutarlo yo toda la tarde.

Reducción por cuidado de un menor.

Esta reducción es un derecho de padres y madres reconocido por cuidado de un menor. Una reducción que, según el Estatuto de los Trabajadores, puede solicitarse hasta que el hijo cumpla 12 años. Esta reducción puede ser entre 1/8 y 1/2 de la jornada total y que, lógicamente, reduce el salario en la misma proporción. Podéis encontrar la respuesta a las preguntas más frecuentes aquí.

¡Ah! ¿Qué se reduce el salario? Toma, pues claro, que aquí no se regala nada. ¿O acaso pensabais que era algún tipo de privilegio esta reducción?

Pero a lo que vamos, que me toca separarme de Martín después de 111 días inseparables. ¡Y eso siempre es muy duro!

Aunque, para ser del todo sincera, he de decir que como mi reincorporación es ligera, en el fondo, fondo, fondo, me viene bien y hasta tengo ganas: Es el momento de volver a la realidad, de desconectar durante un momento de mi intensa vida maternal, de respirar otro ambiente, de dejar atrás el total look Soy Mamá y volver a arreglarme antes de salir de casa. Y es que, por mucho que lo recomendase hace unos días, no es fácil sacar tiempo para prepararse decentemente los primeros meses…

Dicho esto, es el momento de confesar el por qué no estoy llorando ahora mismo a moco tendido. Me he guardado un AS en la manga…

¡Mañana empiezan mis vacaciones!

Ay, benditas vacaciones, qué bien me vais a venir. ¿Qué puede haber mejor después de una baja?

Así que aquí la menda, igual que los niños en el cole, no volverá a pegar ni chapa hasta después de Reyes.

Unos días de relax para disfrutar de la Navidad, de las vacaciones de Emma, para preparar el súper bautizo de Martín y Lidia, y para mentalizarme de que, después de esto, sí vendrá la cruda realidad…

Pero ¿Por qué no seré sueca en estos momentos?

(Y no sólo por IKEA ¿eh?. Descubre el resto de mis motivos en el blog de Un papá en prácticas)

¡Feliz inicio de semana!

;0)

P.D. Las fotos de Martín pertenecen a nuestra recopilación #martínporsemanas de Instagram. ¿Ya nos sigues?